La gamificación es una estrategia cada vez más empleada por las empresas para alcanzar sus objetivos. Para muchos este término es desconocido, pero aquí les voy a explicar qué es y cómo puede beneficiar a tu empresa o proyecto emprendedor.
La gamificación es el uso de las mecánicas del juego en actividades no recreativas u otros entornos. Es decir, trasladar la forma en que funcionan los juegos al ámbito laboral, para con ello potencializar los objetivos de una empresa u organización.
La gamificación se ha empezado a aplicar en todas las áreas de las empresas. Ayuda a mejorar la motivación, la concentración, el esfuerzo, la fidelización y otros valores positivos que normalmente tienen los juegos
Si eres emprendedor puedes contemplar la gamificación para desarrollar tus productos o servicios. Recuerda que jugar hace a las personas felices y una persona feliz compra más que una persona triste o pensativa.
Por ejemplo, para incrementar la motivación y el compromiso de los empleados, colaboradores y hasta clientes, se pueden emplear las mecánicas de recompensa empleadas en juegos: puntos, niveles, premios, bienes virtuales, clasificaciones, desafíos, etc.
Con estas mecánicas se puede lograr que las personas avancen hacia el logro de los objetivos de la empresa u organización. También se puede conseguir el incremento de las ventas al pensar en mecánicas dirigidas a los clientes.
Por ejemplo, pueden enfocarse en las necesidades de superación de las personas. Las mecánicas sugeridas para este caso pueden ser: recompensa, estatus, logro, expresión, competición, altruismo, etc. Con ellas se impulsan y fortalecen los valores y la autoconfianza.
Generalmente se contemplan cuatro fases en la gamificación: motivación, acción, recompensa y logros.
En la primera (acción) se debe motivar a las personas a entrar al juego a través de la promesa de premios, recompensa, etc. Luego hay que incentivar al jugador para que emprenda las acciones necesarias para poder llegar a esa recompensa. Aquí se debe ser muy ingenioso para hacer viral la motivación.
La recompensa debe ser real y debe cumplir con las expectativas de los jugadores. Recuerda que si generas falsas expectativas con la recompensa vas a generar un efecto negativo y podrías perder clientes.
En la fase de logros, las personas alcanzan el sentimiento de bienestar tras alcanzar su meta u objetivo y recibir la recompensa esperada.
Los emprendedores también se pueden beneficiar de la gamificación. Si desarrollan productos o servicios basado en las mecánicas de juego. Así que ya sabes, gamificar tu empresa, negocio o proyecto emprendedor puede hacer tu experiencia divertida y exitosa.
Fuente: Entrepreneur