Emprendedor del Mes: Valeria Vernaza de Lumiboxx
En esta edición de Emprendedor del Mes, Valeria Vernaza miembro de Panal Coworking, nos comparte acerca de lo que la inspiró a llevar a cabo Lumiboxx.
“No se particularmente ese “algo” que me inspira, pero se que ser feliz en mi trabajo y levantarme amando lo que hago, me da el espacio para sentirme inspirada todos los días.”
Dedicarme a la fotografía y tener Lumiboxx, como la mayoría de las cosas más emocionantes de mi vida, llego a mi como un total accidente. Desde chiquita siempre me encantaron las cámaras, me acuerdo que mi papa tenia una Pentax que ni siquiera servía pero yo me pasaba días enteros “tomando fotos”. Poco a poco fui comprando otras cámaras, desde una cámara de rollo de Minnie Mouse, hasta la primera cámara digital que me regalaron, que probablemente tenía 1 megapixel.
Me encantaba mandar a revelar rollos y ver como quedaban mis fotos. Empecé a tomar más conciencia de encuadres, e iluminación y a querer intentar hacer fotos interesantes. Cuando fui creciendo, mas o menos a los 14 años, me encantaba invitar a mis amigas despues de colegio, maquillarlas y hacerles retratos. Todo siempre de lo más informal, y sin siquiera imaginarme que algún día me iba a dedicar a esto profesionalmente.
Este “juego” cambió mi vida cuando un día decidí publicar las fotos en Facebook. Y a los pocos días, tenia personas, que ni siquiera conocía, preguntándome si podía tomarles fotos y cuanto cobraba. Para mi, tomar fotos se había convertido en la manera más divertida y creativa de entretenerse, y pensar que alguien me pagaría por pasar bien fue simplemente la mejor idea que había escuchado. Tanto así, que 12 años después sigo jugando todos los días en esto que el día de hoy llamo mi trabajo.
Cuando seguía en el colegio, apunto de graduarme, se me presentó la oportunidad de hacer una producción para una compañía de moda. Era una oportunidad enorme, aun mas alguien de solo 18 años que no tenía idea de lo que estaba haciendo. Hasta ese momento, cada foto que había tomado era una mezcla entre accidente, casualidad y algo de talento, espero.
Un momento decisivo para empezar a plantearme convertir este hobby en una carrera profesional, fue cuando una empresa grande confió en mí.
Estudie en Miami producción de cine, por casi 2 años. Solo para darme cuenta a la mitad de la carrera que eso no era lo que realmente quería hacer. En mi historia, es sumamente importante recalcar la libertad que me dio mi mama para equivocarme. La confianza a dejarme explorar quien realmente soy, el entusiasmo y apoyo incondicional hacia todo lo que he querido hacer desde cuando le dije que quería ser astronauta hasta fotógrafa.
Desde los 15 años, sin siquiera saberlo, empecé mi camino profesional a la fotografía. Nunca fui alguien que ha tenido un plan de vida, ni metas con tiempos concretos establecidos. Me ha gustado darle espacio y libertad a todo en mi camino para que las cosas cambien si tienen que hacerlo y dejar que la vida me sorprenda. Entender que todos crecemos y triunfamos a diferentes ritmos y tiempos es una lección dura pero importante de aprender.
Cuando me preguntan ¿Qué te inspira?, la respuesta es tan sencilla y compleja a la vez. Rodearme de gente inteligente y tener el ejemplo de mujeres fuertes en mi familia, es una increíble fuente de inspiración para mi. Mi padre y mi abuelo, que han sido las personas más correctas y éticas, me demostraron que se puede ser exitoso y honesto a la vez. Mis colegas, el éxito de los demás, aunque nunca envidiable, siempre es motivacional. El simple hecho de no querer fallarle a la persona que veo en el espejo, y lograr alcanzar todo lo que me he propuesto con Lumiboxx. Hacer que esa niña despistada de 15 años, con muy poca idea de cómo usar una cámara y demasiado tiempo libre en sus manos, sea la mejor fotógrafa que puede ser. No se particularmente ese “algo” que me inspira, pero se que ser feliz en mi trabajo y levantarme amando lo que hago, me da el espacio para sentirme inspirada todos los días.
